Austin-Sparks La Centralidad y Supremacía del Señor Jesucristo es una obra de 4 capítulos sobre como Jesús debe ser lo más importante al creyente.
por T. Austin-Sparks
De The Centrality and Supremacy of the Lord Jesus Christ, 1933
(Traducida por Tesoros Cristianos)
Capítulo 1 – La Centralidad y Supremacía del Señor Jesucristo
Capítulo 2 – La Centralidad y Supremacía de Cristo para el Creyente Individual
Capítulo 3 – La Centralidad y Supremacía de Cristo para la Iglesia, que es su Cuerpo
Capítulo 4 – Como “Cabeza de todo Principado y Potestad”
Más Obras sobre Dios
- Pearlman Teología de Dios
- Nee Adoramos a Dios por sus Caminos
- Keathley La Trinidad
- Deffinbaugh Los Atributos de Dios
- Cox-d-La-Existencia-de-Dios-Si-Hay-Evidencia.topx
- Cox Los Nombres de Dios
- Cox – La Existencia de Dios Sí Hay Evidencia artículo
- Austin-Sparks La Centralidad y Supremacía del Señor Jesucristo
Libros por Theodore Austin-Sparks
- Austin-Sparks Sino que os habéis acercado al Monte de Sión
- Austin-Sparks Monte Sion
- Austin-Sparks La Oración Colectiva
- Austin-Sparks La Escuela de Cristo
- Austin-Sparks La Centralidad y Supremacía del Señor Jesucristo
- Austin-Sparks La Casa Espiritual de Dios
- Austin-Sparks Hombres Cuyos Ojos Han Visto al Rey
- Austin-Sparks El Celo del Señor
- Austin-Sparks El Camino del Crecimiento
- Austin-Sparks Conforme a Cristo
Austin-Sparks era una persona en el movimiento de la santidad, amigos con E.M. Bounds, Jesse Penn-Lewis, etc.
Homosexualidad es una abominación en la vista de Dios. No hay forma de considerar la homosexualidad como algo bueno. Es una perversión. Es en contra de como Dios nos hizo. Dios no hizo los homosexuales como son, sino que Satanás los hizo así por el pecado. La rebelión de Satanás y su pecado son la fuente de la homosexualidad. Ellos desafían a Dios. Es en contra la naturaleza. Dios nos llama a la pureza sexual.
Además, no hay tal cosa de un "transgénero" como el mundo quiere pretender que existen. Dios hizo solamente dos géneros, hombre y mujer. La gente hoy en día son confundido sexualmente. Son enfermos con sus pecados. No hay nada sana en ellos. Se ve su adoración para la perversión sexual. Dios nos exhorta a portarnos como nacimos